Las que me dan vergüenza ajena son las que aparecen delante de las casas de las personas que se van a casar en las que aparecen dibujadas varias lindezas demasiado explícitas. Vamos que me lo encuentro yo y me cambio de casa...
Hay varias de las que tu nombras, algunas desde hace años, en este pueblo, y no se borran fácilmente. La de la fotografía es más inocente, pero lleva seis meses allí, y no tiene pinta de difuminarse, te lo aseguro.
¡Que buena! Eres todo un artista amigo.
ResponderEliminarSaludos
Me encanta lo bien que la has visto y el encuadre, magnífico.
ResponderEliminarSaludos.
Perfecta para una tarjeta de felicitación.
ResponderEliminarSaludos.
Es relativamente fácil mirar mucho lo que te rodea, como en este caso. Gracias, Luis.
ResponderEliminarHola, chapiniki, lo tengo al lado de casa, y lleva allí varios meses, hasta que he decidido hacer la fotografía. Me alegro de que te guste.
ResponderEliminarSaludos
Hola, Isabel, realmente es una felicitación escrita en el suelo, hace más de seis meses. La lluvia no ha conseguido todavía borrarla.
ResponderEliminarSaludos
Está bien.
ResponderEliminarLas que me dan vergüenza ajena son las que aparecen delante de las casas de las personas que se van a casar en las que aparecen dibujadas varias lindezas demasiado explícitas. Vamos que me lo encuentro yo y me cambio de casa...
Hay varias de las que tu nombras, algunas desde hace años, en este pueblo, y no se borran fácilmente. La de la fotografía es más inocente, pero lleva seis meses allí, y no tiene pinta de difuminarse, te lo aseguro.
ResponderEliminarSaludos