La foto del post anterior me gustó por su tranquilidad e historia (instalar y desinstalar, poner y levantar) dada la foto anterior en que apareció la atracción.
Y cuando llueve también, claro. Lo he visto, para el sol, sobre todo en los japoneses, en Roma, eso lo recuerdo muy bien. Para los que somos mayores las atracciones de feria no son muy atractivas, pero para los pequeños creo que sí, como siempre. La foto es continuación de la otra, en la que la atracción ya estaba preparada. Esto me sucede cada año: veo como se monta y se desmonta, en días diferentes.
Hola José Luis, vengo de casa de Giovanni a ver esas fotos del tiovivo y me quedo para seguirte porque me ha gustado mucho tu blog, tus fotos, me gustan ese tipo de fotos del entorno, de las cosas cotidianas. Esta de los paraguas me parece alegre y colorista y eso que es un objeto para días grises! Un abrazo.
Pues bienvenida, Montse. Me alegro de que te gusten algunas de las fotografías, claro está. El señor que vendía los paraguas tenía un sentido del humor y una vitalidad envidiables, supongo que algo del colorido de los paraguas le influía para tener ese carácter.
Hay que comprarlo cuando hay sol...
ResponderEliminarLa foto del post anterior me gustó por su tranquilidad e historia (instalar y desinstalar, poner y levantar) dada la foto anterior en que apareció la atracción.
Un abrazo
Y cuando llueve también, claro. Lo he visto, para el sol, sobre todo en los japoneses, en Roma, eso lo recuerdo muy bien. Para los que somos mayores las atracciones de feria no son muy atractivas, pero para los pequeños creo que sí, como siempre. La foto es continuación de la otra, en la que la atracción ya estaba preparada. Esto me sucede cada año: veo como se monta y se desmonta, en días diferentes.
EliminarUn abrazo
Mucho surtido, claro que es Lugo... Agobia un poco la mescolanza de colores.
ResponderEliminarCreo que no he estado nunca en una tienda con tanto surtido, así que la mezcolanza es ... normal.
EliminarUn abrazo
Hola José Luis, vengo de casa de Giovanni a ver esas fotos del tiovivo y me quedo para seguirte porque me ha gustado mucho tu blog, tus fotos, me gustan ese tipo de fotos del entorno, de las cosas cotidianas.
ResponderEliminarEsta de los paraguas me parece alegre y colorista y eso que es un objeto para días grises!
Un abrazo.
Pues bienvenida, Montse. Me alegro de que te gusten algunas de las fotografías, claro está. El señor que vendía los paraguas tenía un sentido del humor y una vitalidad envidiables, supongo que algo del colorido de los paraguas le influía para tener ese carácter.
EliminarUn abrazo