Dije que me iba pero viendo que usted, Nán, Jesús, Molinos... y tantos otros, más o menos, con altibajos de todo tipo, siguen con su blog abierto, pensé que yo también podía. De hecho el suyo ha estado medio cerrado, de hecho lo quité de mi blog e incluso del facebook (lo uso poco), pero luego vi que estaba activo, de lo cual me alegro. Este verano debiéramos haber llegado a Santiago pero una enfermedad de mi suegra lo ha impedido, espero que el año que viene sí. A través de tu blog, y de otros también, pero ahora hablo del tuyo, Galicia sigue presente durante todo el año en mí. Por ejemplo: un hija de una amiga ha estado en el festival de Ortigueira, un festival que en mi imaginario de hace... más de treinta años era lo más, no musical, ya que era sólo de música celta, sino lo más lejano que podía imaginar en distancia. Más cosas: estoy viendo una entrevista en TVE con Cunqueiro, alguien muy interesante aunque yo no sea escritor. Más: en algún momento iré con mi mujer a Pontevedra, influenciado por "La saga/fuga de JB", y a Bueu. En fin, que me gustaba cuando escribías más en tu blog, no digo nada de "A filla do mar", que también está en barbecho.
Como ya sabes, pues no dejo de repetirlo (a ver si me voy motivando, así), estoy terminando mi tesis. Y le dedico el poco tiempo que puedo dedicarle; con lo que el blog, por ejemplo, queda desatendido. Además, como el blog responde a una necesidad de hacer algo, de contar cosas, en parte pierde su utilidad cuando hay una alternativa que más o menos llena ese hueco. Por eso, si algún día soy capaz de escribir en serio (y es algo que, tras la tesis, me gustaría intentar de una vez con ganas y dedicación), sé que el blog perderá casi todo su sentido.
La saga/fuga es en mi opinión una gran novela, en la primera línea de la literatura española. Una vez hablamos mi padre y yo con Torrente, tras una conferencia, y mi padre le dijo que estaba entre las diez mejores novelas en castellano. Supongo que le gustaría.
Esa entrevista también la conozco: es un place oírlo, ¿no crees?
Si vamos, o mejor dicho, cuando vayamos de nuevo a Galicia te avisaré, esta vez sí que debemos saludarnos en persona. Lo de la actividad del blog lo digo porque escribir me parece una "actividad", algo en lo que uno debe ser protagonista en vez de espectador. No es lo mismo tocar la trompeta que escuchar como la toca otro. Bueno, pues eso, salvando las distancias. Mi hijo también leerá la tesis en octubre o noviembre, creo, y también le está costado lo suyo. Y a su novia también. Antes había menos "doctores", creo. Dices que el blog, cuando escribas en serio, probablemente perderá casi todo su sentido. Depende, si lo usas como entrenamiento casi diario es una buena manera de, necesariamente, pensar en escribir, o en hacer fotos, en mi caso, aunque la mayoría de fotos que estoy poniendo este mes de agosto son de otros años, ya ves qué contradicción. Bueno, que espero que sigas escribiendo de manera regular, y publicando, claro, y que no esperes hasta el final de todo. He leído, volveré a hacerlo, sobre vuestra estancia en Cádiz, y está muy bien todo.
Sí, también yo lo creo (lo de saludarnos en persona).
Como entrenamiento, puede que sí, lo del blog, pero la verdad es que creo que esa función ya la ha cumplido todos estos años, pues gracias a él he escrito cientos de páginas. No está mal. Y en el momento en que intente y logre escribir algo más, habrá una parte fundamental (la de contar, la de vaciarme en algún sitio de vez en cuando) que estará cubierta. Tal vez, entonces, internet se quede para ir contando cómo va lo otro, no sé.
En cualquier caso, tengo ganas, muchas ganas. Y de una forma u otra pretendo seguir tocando la trompeta (que es, por cierto, el instrumento que hace el hijo de Marta en el conservatorio, ¿lo sabías?).
Por eso, entre otras cosas, tengo tantas ganas de acabar el doctorado (¿devaluado, quizá?).
Ánimo a tu hijo y a su novia. ¿En qué son sus doctorados?
De lo de Cádiz, la última foto, la del salto, me parece una maravilla, por la alegría que transmite.
Creo que sí que sabía que el hijo de Marta tocaba la trompeta, porque ella lo había comentado de pasada en su blog en alguna ocasión. También creo recordar que tu hija tocaba el ¿cello? y tu hijo algo también. Y ahora tú mismo también tocas algo. ¡Es tan diferente hablar de música, así, como divertimento intelectual, emocional, que también lo puede ser, o como decoración (Satie ya adivinó todo esto) a tocar un instrumento!. Se puede decir que en las partituras, en los comentarios más o menos eruditos sobre música, o sobre músicos de cualquier estilo y época, en las críticas musicales, en el "postureo" (palabra que me enseñó mi hija, como puedes suponer) sobre música, en las tiendas de discos, que casi no existen... en fin, en ese mundo que creo que sabes a qué me refiero, está todo menos lo esencial: música es lo que suena. En fin. El doctorado de mi hijo es sobre biología vegetal, en su caso la maduración del melón, todo un mundo. El de su novia sobre la fresa, otro mundo también. Y mi hija está acabando Filología Española. Creo que me hago mayor a una velocidad rápida.
Mi hija el saxo y el niño, el pequeño, el cello. En una conferencia que vino a dar aquí hace bastantes años, José L. Pérez de Artega, el locutor de Radio Clásica, dijo que la música era maravillosa, pero que el mundillo de la música era abominable. Supongo que como todos (literatura, arte, vinos o cooperación al desarrollo...).
¡Qué temas de tesis, Dios mío! Desde fuera, qué raras parecen casi todas, ¿no es verdad?
Hoy yo no tengo la tarde trabajadora. He rendido poco. Pero bueno, tengo asumido lo que me toca y estoy yendo a buen ritmo y (fundamental) con agrado.
Qué maravilla.
ResponderEliminar¿No se iba usted?
Vuelvo y me lo encuentro abierto. Me alegro.
Dije que me iba pero viendo que usted, Nán, Jesús, Molinos... y tantos otros, más o menos, con altibajos de todo tipo, siguen con su blog abierto, pensé que yo también podía. De hecho el suyo ha estado medio cerrado, de hecho lo quité de mi blog e incluso del facebook (lo uso poco), pero luego vi que estaba activo, de lo cual me alegro.
EliminarEste verano debiéramos haber llegado a Santiago pero una enfermedad de mi suegra lo ha impedido, espero que el año que viene sí. A través de tu blog, y de otros también, pero ahora hablo del tuyo, Galicia sigue presente durante todo el año en mí. Por ejemplo: un hija de una amiga ha estado en el festival de Ortigueira, un festival que en mi imaginario de hace... más de treinta años era lo más, no musical, ya que era sólo de música celta, sino lo más lejano que podía imaginar en distancia. Más cosas: estoy viendo una entrevista en TVE con Cunqueiro, alguien muy interesante aunque yo no sea escritor. Más: en algún momento iré con mi mujer a Pontevedra, influenciado por "La saga/fuga de JB", y a Bueu. En fin, que me gustaba cuando escribías más en tu blog, no digo nada de "A filla do mar", que también está en barbecho.
Espero que sigamos en contacto activo: un abrazo.
Pues me alegro de que así sea.
ResponderEliminarComo ya sabes, pues no dejo de repetirlo (a ver si me voy motivando, así), estoy terminando mi tesis. Y le dedico el poco tiempo que puedo dedicarle; con lo que el blog, por ejemplo, queda desatendido. Además, como el blog responde a una necesidad de hacer algo, de contar cosas, en parte pierde su utilidad cuando hay una alternativa que más o menos llena ese hueco.
Por eso, si algún día soy capaz de escribir en serio (y es algo que, tras la tesis, me gustaría intentar de una vez con ganas y dedicación), sé que el blog perderá casi todo su sentido.
La saga/fuga es en mi opinión una gran novela, en la primera línea de la literatura española. Una vez hablamos mi padre y yo con Torrente, tras una conferencia, y mi padre le dijo que estaba entre las diez mejores novelas en castellano. Supongo que le gustaría.
Esa entrevista también la conozco: es un place oírlo, ¿no crees?
Bueno, pues seguimos por aquí, J.L.
Un abrazo.
Y, de verdad, me encantaría que cuando vengas me avisaras.
ResponderEliminarSi vamos, o mejor dicho, cuando vayamos de nuevo a Galicia te avisaré, esta vez sí que debemos saludarnos en persona. Lo de la actividad del blog lo digo porque escribir me parece una "actividad", algo en lo que uno debe ser protagonista en vez de espectador. No es lo mismo tocar la trompeta que escuchar como la toca otro. Bueno, pues eso, salvando las distancias.
ResponderEliminarMi hijo también leerá la tesis en octubre o noviembre, creo, y también le está costado lo suyo. Y a su novia también. Antes había menos "doctores", creo. Dices que el blog, cuando escribas en serio, probablemente perderá casi todo su sentido. Depende, si lo usas como entrenamiento casi diario es una buena manera de, necesariamente, pensar en escribir, o en hacer fotos, en mi caso, aunque la mayoría de fotos que estoy poniendo este mes de agosto son de otros años, ya ves qué contradicción.
Bueno, que espero que sigas escribiendo de manera regular, y publicando, claro, y que no esperes hasta el final de todo. He leído, volveré a hacerlo, sobre vuestra estancia en Cádiz, y está muy bien todo.
Es un verano raro para mí, este que estamos.
Un abrazo
Sí, también yo lo creo (lo de saludarnos en persona).
ResponderEliminarComo entrenamiento, puede que sí, lo del blog, pero la verdad es que creo que esa función ya la ha cumplido todos estos años, pues gracias a él he escrito cientos de páginas. No está mal. Y en el momento en que intente y logre escribir algo más, habrá una parte fundamental (la de contar, la de vaciarme en algún sitio de vez en cuando) que estará cubierta. Tal vez, entonces, internet se quede para ir contando cómo va lo otro, no sé.
En cualquier caso, tengo ganas, muchas ganas. Y de una forma u otra pretendo seguir tocando la trompeta (que es, por cierto, el instrumento que hace el hijo de Marta en el conservatorio, ¿lo sabías?).
Por eso, entre otras cosas, tengo tantas ganas de acabar el doctorado (¿devaluado, quizá?).
Ánimo a tu hijo y a su novia. ¿En qué son sus doctorados?
De lo de Cádiz, la última foto, la del salto, me parece una maravilla, por la alegría que transmite.
Otro para ti.
Creo que sí que sabía que el hijo de Marta tocaba la trompeta, porque ella lo había comentado de pasada en su blog en alguna ocasión. También creo recordar que tu hija tocaba el ¿cello? y tu hijo algo también. Y ahora tú mismo también tocas algo. ¡Es tan diferente hablar de música, así, como divertimento intelectual, emocional, que también lo puede ser, o como decoración (Satie ya adivinó todo esto) a tocar un instrumento!. Se puede decir que en las partituras, en los comentarios más o menos eruditos sobre música, o sobre músicos de cualquier estilo y época, en las críticas musicales, en el "postureo" (palabra que me enseñó mi hija, como puedes suponer) sobre música, en las tiendas de discos, que casi no existen... en fin, en ese mundo que creo que sabes a qué me refiero, está todo menos lo esencial: música es lo que suena. En fin.
EliminarEl doctorado de mi hijo es sobre biología vegetal, en su caso la maduración del melón, todo un mundo. El de su novia sobre la fresa, otro mundo también. Y mi hija está acabando Filología Española. Creo que me hago mayor a una velocidad rápida.
Un abrazo
Mi hija el saxo y el niño, el pequeño, el cello.
ResponderEliminarEn una conferencia que vino a dar aquí hace bastantes años, José L. Pérez de Artega, el locutor de Radio Clásica, dijo que la música era maravillosa, pero que el mundillo de la música era abominable. Supongo que como todos (literatura, arte, vinos o cooperación al desarrollo...).
¡Qué temas de tesis, Dios mío! Desde fuera, qué raras parecen casi todas, ¿no es verdad?
Hoy yo no tengo la tarde trabajadora. He rendido poco. Pero bueno, tengo asumido lo que me toca y estoy yendo a buen ritmo y (fundamental) con agrado.
Un abrazo, José Luis.