La Navidad para mí sigue siendo un escaparate atestado de juguetes y de niños como yo aplastando las narices contra él, dejando nuestras huellas en el cristal borroso de nuestros sueños.
Ya ha pasado, pero te deseo también feliz año, María. El testimonio más sensato que escuché ayer por la tele sobre el atasco de la AP 6 fue el de un gallego que, con sus dos hijos, había salido en dirección a Vigo contando con que podían quedarse atrapados por el camino, e iban preparados con comida, bebida, y ropa de abrigo. No todos los gallegos serán así, pero es al que escuché con más simpatía, o empatía.
La Navidad para mí sigue siendo un escaparate atestado de juguetes y de niños como yo aplastando las narices contra él, dejando nuestras huellas en el cristal borroso de nuestros sueños.
ResponderEliminarUn abrazo, y felices fiestas para ti y los tuyos.
La infancia también puede ser la época más larga de nuestra vida. Realmente si "esto" estuviera bien montado debería de ser así.
EliminarUn abrazo
La Navidad es la ilusión. No se puede vivir de verdad sin ilusión. Te deseo toda para estos días.
ResponderEliminarGracias, Pedro. Cumplo 60 en marzo, y debo renovar mis ilusiones a menudo.
EliminarUn abrazo
Feliz Navidad Andandos!
ResponderEliminarYa ha pasado, pero te deseo también feliz año, María. El testimonio más sensato que escuché ayer por la tele sobre el atasco de la AP 6 fue el de un gallego que, con sus dos hijos, había salido en dirección a Vigo contando con que podían quedarse atrapados por el camino, e iban preparados con comida, bebida, y ropa de abrigo. No todos los gallegos serán así, pero es al que escuché con más simpatía, o empatía.
EliminarUn abrazo