Estas dos fotografías, ya por sí solas, son una serie magnífica.
Gracias, Pedro, fue una casualidad encontrarnos con tantas monjas.Un abrazo
Estas dos fotografías, ya por sí solas, son una serie magnífica.
ResponderEliminarGracias, Pedro, fue una casualidad encontrarnos con tantas monjas.
ResponderEliminarUn abrazo